Limpieza Criogénica
Técnica de limpieza industrial basada en la proyección de partículas de CO2 en estado sólido
¿Qué es la limpieza criogénica?
Es una técnica de limpieza industrial basada en la proyección de partículas de CO2 en estado sólido, es decir, hielo seco; el hielo seco sale a altas velocidades con la ayuda del aire comprimido y actúa de una forma similar al método del chorro de arena, que consiste en acelerar un agente abrasivo en un flujo de aire a presión y que impacta en una superficie para limpiarla o prepararla. La limpieza criogénica, sin embargo, es un sistema mucho más limpio y efectivo.
Actualmente, el tipo de limpieza utilizada para obtener los mismos resultados es más abrasiva y puede llegar incluso a producir daños en la superficie final. Además, también genera más residuos y exige mayor mano de obra por lo que el tiempo de parada es mayor. Los materiales que se usan pueden ser arenas, disolventes, agua, cepillos, espátulas, etc.
Sin embargo, la limpieza criogénica no necesita desmontajes ni tampoco genera más residuos que la suciedad de la que intentamos deshacernos. Además, es muy importante que destaquemos que no daña las superficies.
¿Cómo funciona el sistema de limpieza criogénica?
Efecto Cinético
- La velocidad de las partículas es crítica para la limpieza.
- Los pellets de hielo seco tienen poca dureza y se subliman al instante.
Efecto Choque Térmico
- La baja temperatura del CO2 (-78,5ºC) crea un gradiente de temperatura entre suciedad y superficie a limpiar.
- Se provocan micro-grietas entre las capas de suciedad, rompiéndolas y separándolas de la superficie a limpiar.
Efecto Expansión de Gas
- Al pasar de la fase sólida a gas, el volumen se expande 800 veces produciendo micro-explosiones.
- La suciedad se levanta de la superficie al instante.
Ventajas de la limpieza criogénica
Este sistema de limpieza responde a todas nuestras exigencias corporativas en este aspecto: es respetuoso con el medioambiente y es un método de limpieza responsable y seguro que puede utilizarse en numerosos procesos industriales.
No deja residuos secundarios por lo que nos permite ahorrar los costes asociados a la eliminación de los residuos que surgen si utilizamos otros métodos de limpieza.
No es abrasivo, prolongando la vida útil de los equipos y componentes y minimizando la erosión superficial.
Los riesgos para la salud se reducen y mejora la seguridad del operario debido al descenso significativo de la exposición a agentes químicos y métodos de limpieza peligrosos, consiguiendo un ambiente de trabajo mucho más seguro.
